El Pan de Cádiz es un dulce navideño muy típico del sur de España. Se trata de una especie de cofre elaborado con mazapán relleno de crema de batata y yema, que acarrea cientos de años de tradición a sus espaldas, lo que bien merece la pena tener que estar a régimen el resto de la semana.
Hay dulces que no se deben pasar por alto, sobre todo cuando su receta conserva el sabor de decenas de décadas y su procedencia contiene el peso de varias historias dignas de ser contadas generación tras generación.
En Casa Mira queremos revelaros algunos datos curiosos de este dulce navideño y la receta para que podáis elaborarlo en casa.
La curiosa historia del Pan de Cádiz
Pocos dulces pueden tener tantas historias sobre su procedencia como es el Pan de Cádiz. Hemos encontrado hasta 4 relatos distintos, pero el que más nos gusta es el que se cuenta a los turistas cuando pasan por las pastelerías de la ciudad y se interesan por el aspecto tan peculiar que tiene este dulce.
Cuenta la leyenda que, allá por el siglo XIX, en plena Guerra de la Independencia, los franceses asediaban las tierras gaditanas, ejerciendo presión y control sobre la población impidiendo que entrasen mercancías y alimentos en la ciudad.
La falta de trigo provocó que se utilizase para elaborar pan uno de los ingredientes de los que había abundancia por aquel entonces, la almendra. Dicen que, en el Palacio de la Aduana, había una gran carga de almendra que estaba destinada a su exportación, pero no podían darle salida; así los gaditanos decidieron elaborar un pan a base de almendras, es decir, una especie de mazapán. Estos fueron los inicios del famoso Pan de Cádiz.
Lo cierto, es que, por muy interesante que nos pueda parecer esta historia, es bastante cuestionable, ya que era poco probable que se emplease un ingrediente mucho más caro para elaborar pan que el propio trigo, y cuya población general no hubiera podido acceder a él fácilmente.
Otras historias, mucho más aburridas, aunque seguramente con más papeletas para que sean ciertas, son las que atribuyen la creación del Pan de Cádiz a un pastelero conocido como Antonio Valls Garrido, inventor del turrón a mediados del siglo XIX y residente en Cádiz.
Aseguran que Valls creó el Pan de Cádiz con forma de cobre con el fin de guardar en su interior pequeños tesoros dulces, y por eso decidió rellenarlo con frutas escarchadas, yema, cabello de ángel o crema de batata.
Sea como fuere, lo cierto es que el Pan de Cádiz se ha ganado el reconocimiento, no solo de Cádiz, sino de todas las mesas del país, con el paso de los siglos.
Cómo hacer Pan de Cádiz casero
Ingredientes
Para el mazapán
- 250 g de almendra molida
- 250 g de azúcar glas
- 2 claras de huevo
Para la crema de yema
- 100 g de azúcar
- 6 yemas de huevo
- 3 cucharadas de agua
Para el relleno de batata
- 1 boniato mediano
- 50 g de azúcar glas
Para pintar
- 1 yema de huevo
Preparación del Pan de Cádiz
Preparación de la masa
- En un bol mezclamos las almendras molidas con el azúcar glas. A continuación, añadimos las claras de huevo y amasamos con las manos hasta obtener una masa lisa y homogénea.
- Cubrimos con film y dejamos reposar 2 horas a temperatura ambiente.
Relleno de la batata
- Lavamos bien los boniatos y los asamos enteros, sin pelar, en el horno a 180°C hasta que al pincharlos estén bien blandos, más o menos 30 – 40 minutos.
- Dejamos enfriar, los pelamos y hacemos un puré junto con el azúcar glas y reservamos.
Crema de yema para el relleno
- Batimos las yemas y las reservamos. En un cazo ponemos el agua y el azúcar para hacer un almíbar consistente. Volcamos las yemas batidas en otro cazo y añadimos el almíbar por encima muy lentamente y vamos batiendo a mano para integrarlo.
- Colocamos el cazo en el fuego sin dejar de batir hasta que espese y sin que llegue a hervir.
- Apartamos y dejamos enfriar tapado con un film transparente.
Rellenando el pan
- Estiramos el pan con el rodillo entre dos láminas de papel de horno. Debe tener medio centímetro de espesor.
- Forramos un molde alargado con papel de horno. A continuación, colocamos una lámina de mazapán por todo el fondo y laterales del molde recortando el sobrante.
- Rellenamos con una capa de crema de yema, y volvemos a cubrir con otro rectángulo de mazapán sin que queden huecos. Encima ponemos la crea de batata y volvemos a poner otro rectángulo de mazapán, cerrando bien los bordes.
- Por último, hacemos líneas paralelas por la parte de arriba con un cuchillo afilado y teniendo cuidado de no cortar la capa de mazapán entera; y pintamos con yema de huevo batida en la parte superior.
- Previamente habremos calentado el horno a 200°C, arriba y abajo, y horneamos durante 6 minutos. Para dorarlos podemos poner el horno en grill o subir los panes en la parte alta del horno hasta que se doren.
- Dejamos enfriar completamente antes de desmoldar.
Aunque si no quieres mancharte las manos, pero quieres probar un estupendo Pan de Cádiz, en Casa Mira lo puedes encontrar. ¡Es una de nuestras especialidades!