Muchos confunden el guirlache con el turrón de almendra. Sin embargo, el guirlache tiene un sabor y una textura muy distinta a la del turrón.
En Casa Mira queremos contarte qué es el guirlache, de dónde proviene y porqué tiene un nombre francés.
El guirlache. Un dulce árabe con nombre francés
Es curioso que un dulce de procedencia árabe de la época medieval termine llevando un nombre francés. Está claro que los acontecimientos históricos, a veces, nos regalan curiosidades inesperadas que se ven reflejadas en cosas tan cotidianas como puede ser el nombre de un dulce tradicional.
Lo cierto, es que fueron los árabes, a su paso por la Península, los que nos obsequiaron con la estupenda receta del guirlache. Los mismos árabes que introdujeron el turrón, elaborado con miel y almendras (aquí te dejamos la receta de turrón de almendra casero). Sin embargo, el guirlache no tuvo mucha fama, ya que, en aquellos tiempos medievales, el azúcar y la almendra eran productos que pocos bolsillos podían permitirse.
Tuvieron que llegar los franceses y su opulencia, en el siglo XIX, para popularizar la receta del guirlache en España. Especialmente en la zona de Aragón, Cataluña y Valencia, el guirlache tuvo mucho éxito, así como el turrón, ya que eran zonas donde abundaban estos ingredientes. Así que, además de la tradición de tomar guirlache, también heredamos su nombre, que procede del francés, “grillage”, lo que quiere decir “algo tostado”.
¿En qué se diferencia el guirlache del turrón?
Aunque en muchas pastelerías podrás encontrar la frase “turrón de guirlache”, lo cierto, es que se tratan de recetas distintas y, por tanto, dulces diferentes.
Cierto que su composición principal es a base de almendras y azúcar, pero el guirlache tiene la diferencia de que, en su receta básica, no lleva nada más. Al turrón, por el contrario, suele añadírsele algún tipo de miel.
Otra diferencia entre el guirlache y el turrón es que el azúcar está más caramelizado en el primero, y las almendras se añaden con piel, lo que aporta una textura distinta de la del turrón. Por otro lado, el guirlache siempre es duro, mientras que los turrones pueden tener una receta más untuosa.
¿Cómo se hace el guirlache?
Su receta más sencilla consiste, simplemente, en hacer, en una sartén, un caramelo con el azúcar, añadirle las almendras enteras y con piel, y remover para que se queden bien impregnadas.
A continuación, las extendemos sobre una fuente de horno donde, previamente, habremos colocado un papel antiadherente. Con un rodillo impregnado de aceite, aplastamos hasta dejar una fina capa. Se deja enfriar y se corta en porciones.
Como dice el dicho “cada maestrillo tiene su librillo”, así que, a lo largo de la historia, según la localidad en la que nos encontremos, hallaremos una receta del guirlache distinta. Algunas incluyen zumo de limón y, otras, miel.
Sea como sea, el guirlache es un dulce estupendo para consumir durante todo el año y una de nuestras especialidades.
En Casa Mira lo preparamos artesanalmente con almendra Marcona y mucha azúcar tostada. ¡Todo un placer para mente y cuerpo!
Y, si no tienes la suerte de estar por la zona, siempre puedes visitar nuestra tienda online.